A DIARIO: EL SURF ARRUINÓ MI VIDA.

Y otro baño de mierda y otro viaje de vuelta a casa cagándome en la puta.
Ya ni me acuerdo cuando cogí olas decentes y encima el agua está fría de eso que se te hielan las pelotas al entrar. Además, debe de hacer ya como cosa de mes y medio que no me plancho una buena maniobra.
Soy, ahora mismo, un racimo de uvas pochas /las uvas de la ira/, un cúmulo de desesperación, el éxito de todos los fracasos /como dijo el poeta/ y una maraña de fustración.
Soy una marioneta insignificante cuyo estado de ánimo depende de algo tan volátil y casual como las ondalucaciones que hay sobre el agua del mar.
El surf ha arruinado mi vida.

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Dios mío, si alguien tiene una mala noticia que darme que aproveche ahora. Todo me da igual, he cogido unas olas tan divertidas que voy de vuelta a casa como recién salido de una operación de estiramiento facial o como coño se diga.
Las olas no eran la hostia pero el mar estaba tan ordenado y limpio que.... Diosssss, que bueno. Es como cuando.... nah que se yo, da igual, déjalo. El caso es que... Diossssss.
Soy una marioneta insignificante cuyo estado de ánimo depende de algo tan volátil y casual como las ondalucaciones que hay sobre el agua del mar.
El surf me ha salvado la vida.