20 sept 2011

KELLY KAHANAMOCU

Por fin voy quitándome cosas pendientes de encima. Una de ellas era una nueva historia para la gente de Natural. Aquí os dejo con el enlace por si queréis echarle un ojo. Va sobre la cobardía.

http://www.naturalsurfing.com/index.php?option=com_content&view=article&id=556:un-cobarde-dos-cobardes-&catid=12:opiniones&Itemid=12

Y para los que tengan más tiempo muerto que Sara Montiel, os dejo con la penúltima. A ver si os mola. Va sobre el peligro de las ondas expansivas.

Como era más terco que una mula, se pasaba las noches viendo vídeos de Reynolds, Wilson, Coleborn y compañía, aunque más bien debería decir que los analizaba enfermizamente porque paraba casi cada fotograma para observar los brazos, la posición sobre la tabla y en qué punto de la ola hacían tal o cual cabriola.
Como además también era tenaz como un toro en celo, cada mañana intentaba emular lo que había visto hacer a sus ídolos la noche anterior. Pero qué va, ni pa Dios. Una cosa era verlo en el dvd y otra bien distinta aplicarlo a la vida real.
Poco a poco notaba como que le iba venciendo la desgana aún así el tío no se rendía hasta que ocurrió lo que ocurrió aquel fatídico día de verano.
El caso es que cuando caminaba por la arena con su novia ambos alzaron la cabeza a la vez, como por azar, hacia un punto del agua donde se encontraba uno de esos chicos-dvd por los que sentía una especie de admiración repulsiva que le torturaba. La cuestión es que aquel chico se plantó tal aéreo que a nuestro pobre amigo no le quedó otra que apartar la mirada humillado y, ¿qué vio?, pues vio un embobamiento en los ojos de su novia que le pusieron aún más triste. Jamás encontraba ese destello fugaz de idolatría cuando él salía del agua a pesar de que Hubiera dado cualquier cosa porque tan solo una maniobra suya pudiera humedecer sus ojos con una lagrimilla de admiración que le arrancase un suspiro ahogado.
Como siempre la besó y corrió hacia la orilla y lo intentó y lo intentó y no hizo más que caerse y caerse y sentía odio y se creía torpe y a veces miraba la tabla por los aires del chico dvd y otras veces a su novia en la arena mirando en posición opuesta a la que él estaba y todas esas cosas que os estoy numerando sin comas le hicieron sentirse tan pequeño y enfadado que en vez de saliva tenía pólvora. Cuando ya no pudo más, salió del agua y por no pegarle un puñetazo a su tabla (pues le costaban muchas horas extra en el almacén) cogió una piedra y la arrojó contra la arena con tal fuerza que provocó una onda expansiva que le transportó a otro planeta.
El por qué sabemos que nuestro protagonista acabó en otro planeta no incumbe al lector, sin embargo si explicaré su proceso de tele transporte a ese universo paralelo que no deja de ser el motivo de todo este absurdo:
1. El impacto de la piedra contra la arena provocó un primer temblor de tal magnitud que tanto la tierra como el mar comenzaron a desvanecerse en el aire como la arena de una duna barrida por el viento.
2. Toda esa tormenta arenosa con partículas de tierra y mar situaron a nuestro protagonista en una especie de boca de huracán que le hizo dar vueltas por el aire perdiendo el conocimiento y el contacto con una realidad que también desaparecía en ese vórtice delirante.
3. Sonó una música extraña como de flautas y ocarinas mientras todo iba volviendo a su sitio lentamente. Los colores y las formas, que hasta ahora flotaban en el aire en microscópicas piedritas que se colaban por la boca y las orejas, fueron juntándose en cuerpos cada vez mayores para dar forma a un nuevo mundo en apariencia igual a ese del que procedía.

También, con vuestro permiso, voy a saltarme la fase de cómo se familiarizó con este nuevo universo, repito, de similar apariencia, e iré al meollo que es lo que nos interesa.
El caso es que nadie en el nuevo mundo había visto una tabla de surf por lo que nuestro amigo levantaba una expectación enorme a cada sitio que iba. Todos le miraban boquiabiertos desde la arena mientras él ejecutaba unos malabares inauditos que nosotros aquí calificaríamos de un surf ramplón y sin más.
La ignorancia encumbró su mediocridad y pronto se convirtió en icono de una nueva industria floreciente. Los chavales le imitaban y caminaba sobre una alfombra de admiración allá donde iba. Se sentía rey de ese universo extraño y eso le gustó al principio pese a que, curiosamente, las pesadillas de su antiguo mundo aún continuaban carcomiéndole por dentro y por eso era consciente que de rey tenía más bien poco. Si esta gente viera pros de verdad les daría un vuelco al corazón, pero….

Pronto comenzó a darle más y más vueltas a esa idea y se sintió vacío, no solo por el fango con el que le cubría la mentira sino por la falta de inspiración: fuera donde fuera la gente hacía lo mismo que él. Todo eran pequeñas barcas y él era el faro, pero ¿entonces quién coño le iluminaría ahora?.
Llegados a este punto su surf se estancó. Mientras todos entraban motivados a mejorar para alcanzar el nivel de nuestro protagonista de hoy, él se veía mermado porque todas esas maniobras dvd solo eran fantasmas en su cabeza que pese a que él las conocía no existían en este mundo y con lo cual eran más lejanas e inaccesibles y es que, ¿cómo te sentirías al tratar de conseguir algo real que no puedes compartir con nadie porque solo existe en tu cabeza?

Esta quimera le destrozaba por eso un día, mientras caminaba entre vítores y flashes hacia la orilla, nada que ver con aquel paseo con su novia, se quedó allí clavado y sin avanzar. Y así permaneció por siempre el corazón más mítico, apasionado y huérfano que jamás haya recorrido las playas de aquel mundo que me acabo de sacar de la manga pero que probablemente exista.

Archivo del blog

Datos personales

Mi foto
constantino romero