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Señor, el hombre de la mesa del fondo me ha pedido que le llame. Dice que le han servido un vaso de agua rota // ¿Qué?, se está usted riendo de mí?, ¿qué es ese cuento del agua rota? // No lo sé señor, insiste en hablar con usted y se le ve batsante alterado // Buenas noches caballero, ¿puedo ayudarle en algo? // Pues verá usted, esto es lo que pasa: el agua que me han servido está rota, observe la grieta que tiene en su superficie // ¡Cáspita!, es cierto // Por supuesto que es verdad, ¿qué se pensaba usted?. Mire, pruebe a introducir la esquinita de esta servilleta en la grieta en cuestión // !Caracoles!, no se empapa en contacto con el líquido // Cómo se va a empapar si está roto, ve lo que le decía, ¡mi agua está rota!, además por más que beba no me quita la sed // No se preocupe caballero, ahora mismo le traen otra botella // Muy bien, asegúrese de que no contenga más agua rota.
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2 comentarios:
bonita metafora, me encanto seño legi :)
NO ES UNA METÁFORA, ES UNA GILIPOLLEZ ;)
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