UNPARDEDIASPORTERRAGALEGA

La primera vez que alcé la vista Sonny Y Michael aún no sabían que Luca Brassi había sido asesinado aquella misma noche.
Me dió por pensar hasta qué punto los tejados hacen que las casas sean tan diferentes porque, en esencia, el cuerpo no deja de ser el mismo en todos los sitios. Un poco como con los pelos de la gente, que dice mucho.
Los cementerios también le dan mucha personalidad a los pueblos. Una especie de aire propio con sus piedras carcomidas por el tiempo y el musgo, ¿a que sí?.

Cuando la volví a levantar, la guerra ya estaba declarada entre la familia Corleonne y la Tattaglia y las olas que recibía esa playa gallega desde vaya usted a saber donde eran bastante menos apetecibles que el capítulo trece.
El día anterior tampoco había surfeado y tenía algo de ganas, pero hacía frío, llovía a mares cada cinco minutos y la pizza aún me desbordaba el estómago.

Me encanta dibujar en las servilletas de los bares: limpiando son lo peor pero como lienzo improvisado no tienen precio, y más aún si les cae una gotilla de café. El problema es que aquel estaba tan rico que se fue todo para dentro, como el capítulo trece.